La mujer transgéreno acusada de inyectar cemento y otras sustancias en los glúteos de pacientes, uno de los cuales habría fallecido a causa de esta práctica, llegó a un acuerdo con la justicia en el Condado de Broward, Florida.
Ron Oneal Morris, de 36 años, podría pasar hasta 15 años en la cárcel, algunos de los cuales en libertad condicional, tras firmar el lunes un acuerdo ante el juez que entiende en la causa.
Morris ya había cumplido un año de cárcel en el Condado de Miami-Dade, al sur de Broward, por denuncias relacionadas con la práctica ilegal de inyectarle cemento y otros pegamentos a supuestos pacientes, hombres y mujeres.
En uno de estos casos, una mujer murió supuestamente a causa de las 10 inyecciones que habría recibido para mejorar la apariencia de sus glúteos, entre 2007 y 2010.
Shatarka Nuby, de Tamarac, Florida, falleció el 17 de marzo de 2012, mientras cumplía una condena federal por robo de identidad, según informa el diario Sun-Sentinel en su página web.
El lunes, Morris llegó a un acuerdo con la justicia y en tres semanas se leerá la sentencia, que puede alcanzar hasta 15 años tras las rejas aunque también podría cumplir parte de la condena en libertad condicional.
