El niño de 8 meses murió a las 11:18 a.m. en el Boston Children’s Hospital, según la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Plymouth.
El bebé herido en los homicidios familiares de Duxbury, Massachusetts, murió, dijeron los fiscales el viernes, con lo que se une a sus dos hermanos que también murieron.
El niño de 8 meses murió a las 11:18 a.m. en el Boston Children's Hospital, según la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Plymouth. Fue identificado como Callan Clancy.
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Callan había sido hospitalizado con lo que los fiscales describieron inicialmente como "evidencia de daño".
Los fiscales inicialmente no dijeron cómo se cree que murió el bebé, o si su madre enfrentaría nuevos cargos; los funcionarios habían dicho anteriormente que buscaban dos cargos de homicidio y otros cargos en su contra por la muerte de los hermanos del bebé.
La Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Plymouth anunció a principios de semana que Lindsay Clancy es sospechosa de estrangular a sus hijos mayores, identificados como Cora, de 5 años, y Dawson, de 3. La empleada del Hospital General de Massachusetts de 32 años y nativa de Connecticut también enfrenta tres cargos de estrangulamiento y tres cargos de asalto y agresión con un arma mortal. Lo último que se supo es que estaba bajo custodia policial en un hospital de Boston.
Los asesinatos han sacudido a la comunidad de la costa sur de Duxbury. Los socorristas, los miembros de la comunidad y la familia están tratando desesperadamente de procesar la tragedia que se desarrolló el martes por la noche y llorar la pérdida de los niños descritos como que tienen una "vida hermosa".
Fuentes de nuestra cadena hermana NBC10 dijeron que Clancy atravesaba una depresión posparto. Las autoridades no han dicho si están considerando eso como un factor en sus presuntos crímenes, pero la tragedia hace que muchos hablen sobre un tema que muchos activistas aseguran que no se discute lo suficiente.
"Puedo sentir por lo que está pasando la familia", dijo Heather Martin, defensora de la salud mental materna.
Martin, quien también trabaja como asistente médico en pediatría en Dartmouth Health Children's, perdió a su hermana mayor en 2009. Martin dijo que su hermana terminó con su vida solo tres semanas después de dar a luz a su primer hijo, algo que la familia se dio cuenta más tarde fue el resultado de psicosis posparto.
"Es una condición rara. Es una ruptura con la realidad. Realmente creo que mi hermana no estaba en sus cabales cuando terminó con su vida", dijo Martin.
Martin se ha propuesto como misión aumentar las pruebas de detección y las capacitaciones para las condiciones de salud mental materna, que afectan a una de cada cinco mujeres.
"Creo que, si tuviéramos proveedores capacitados especializados y lugares para que las madres acudan, no habría perdido a mi hermana", dijo Martin.
Jamie Zahlaway Belsito fundó el Maternal Mental Health Leadership. La organización sin fines de lucro se dedica a abogar por recursos y políticas que apoyen a todas las mujeres y personas en edad fértil. Jugaron un papel decisivo en el lanzamiento del National Maternal Mental Health Hotline, que brinda apoyo gratuito y confidencial a cualquier madre embarazada y posparto. La línea directa es 1-833-9-HELP4MOMS.
COMUNIDAD UNIDA EN VIGILIA
La comunidad de Duxbury se unió el jueves en la noche en una vigilia realizada en Holy Famili Church, para llorar y rezar por la muerte de los dos niños, presuntamente, a manos de su mamá, así como por los rescatistas que se enfrentaron a una escena que ha sido descrita como “difícil de procesar”.
Una mujer que asistió a la vigilia era la madre de un bombero que respondió al incidente el martes por la noche. Contó que su hijo de 25 años ha tenido un momento difícil.
"Realmente lo golpeó duro", dijo Debbie Heath. "Espero que nunca vuelva a ver algo así".
APOYO PARA SOCORRISTAS
El jefe de bomberos de Duxbury, Robert Reardon, emitió un comunicado el jueves por la mañana, diciendo que se estaba poniendo a disposición ayuda profesional para los socorristas de su ciudad, así como para las comunidades vecinas, muchas de las cuales ayudaron el martes por la noche.
