Otros dos conductores sufrieron heridas leves, según los investigadores.
DENVER, Colorado - Tres adolescentes acusados de matar a una joven de 20 años mientras arrojaban grandes piedras a los autos que transitaban por la carretera fueron acusados de asesinato y otros delitos, dijeron los fiscales el miércoles.
Nicholas "Mitch" Karol-Chik, Joseph Koenig y Zachary Kwak, todos de 18 años, enfrentan cargos idénticos de asesinato en primer grado, intento de asesinato en primer grado, asalto en segundo grado e intento de asalto en segundo grado por la muerte de Alexis Bartell. y presuntos ataques a otros seis autos en los suburbios de Denver, anunció el primer fiscal del distrito judicial, Alexis King.
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Otros dos conductores sufrieron heridas leves, según los investigadores.
La oficina de la abogada de Karol-Chik, Holly Gummerson, se negó a comentar. Un mensaje que se le dejó a la abogada de Kwak, Emily Boehne, quien estaba en la corte, no fue respondido de inmediato. Koenig está representado por un abogado de la oficina del defensor público, que no comenta los casos a los medios.
Según la oficina del alguacil del condado Jefferson, Bartell estaba hablando por teléfono con una amiga cuando la roca la golpeó mortalmente el 19 de abril. Después de que la llamada quedó en silencio, la amiga rastreó la ubicación de Bartell con una aplicación de teléfono y encontró a la mujer muerta en el interior de su auto, que se había estrellado a un lado de la carretera.
Karol-Chik les dijo a los investigadores que Koenig redujo la velocidad para que Kwak pudiera tomar una foto del auto de Bartell después de que chocara contra un campo. Dijo que los tres se emocionaban cada vez que golpeaban un automóvil con rocas de jardinería tomadas de un estacionamiento de Walmart, pero reconoció que sentía "un poco de culpa" al pasar junto a su automóvil, según documentos judiciales.
Kwak dijo que tomó la foto porque pensó que Karol-Chik o Koenig querrían tener un “recuerdo” de lo que había sucedido, según las declaraciones juradas del arresto.
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Karol-Chik dijo a los investigadores de la oficina del alguacil del condado Jefferson que él y Koenig habían arrojado piedras e incluso una estatua a los autos que pasaban al menos otros 10 días antes de que mataran a Bartell. Kwak se enteró de lo que habían estado haciendo y pidió unirse a ellos, según el relato de Karol-Chik en las declaraciones juradas.
Karol-Chik y Kwak ofrecieron diferentes relatos sobre quién lanzó la piedra fatal. Koenig no habló con los investigadores después de su arresto, según las declaraciones juradas del arresto.
