California

“Lo masacró con tres cuchillos”: apuñaló más de 100 veces a un hombre, pero no irá a la cárcel

"(El juez) acaba de otorgar a todos en el condado una licencia para matar a personas después de fumar marihuana", dijo Sean O'Melia, el padre de la víctima.

An image of Bryn Spejcher, who was convicted in the deadly stabbing of Chad O’Melia.

Una mujer que apuñaló mortalmente a un hombre más de 100 veces antes de herirse a ella misma con un cuchillo en lo que se describió como un “estado psicótico inducido por marihuana” no cumplirá ninguna pena de prisión, dictaminó un juez el martes.

Bryn Spejcher, de 33 años y residente de Thousand Oaks, se le ordenó cumplir 100 horas de servicio comunitario y dos años de libertad condicional por el apuñalamiento mortal de Chad O'Melia.

Spejcher, durante un estado de psicosis desencadenado por la marihuana, apuñaló a O'Melia más de 100 veces el 27 de mayo de 2018, después de que fumaran la droga juntos, según autoridades.

“Ella inhaló y, a partir de ese momento, entró en un estado psicótico”, dijo Audry Nafziger, fiscal adjunta del condado de Ventura. “Poco después, ella cogió tres cuchillos diferentes de su cocina y lo masacró, penetrando cada órgano importante, por todo su cuerpo y su cara”.

Según Nafziger, la cámara corporal que llevaban los agentes de policía que respondieron esa noche mostró que el acusado ni siquiera se dio cuenta cuando llegó la policía.

"Cuando llegaron, ella estaba arrodillada sobre él, cubierta de sangre", dijo Nafziger. “Él estaba muerto en el suelo y ella se estaba apuñalando con un cuchillo rojo de sierra de 10 pulgadas, cubierto de sangre en el cuello varias veces. Se cortó la arteria carótida, o se cortó la arteria carótida. Tuvieron que aplicarle cuatro descargas eléctricas”.

Debido a que Spejcher estaba bajo psicosis en el momento del apuñalamiento, fue acusada de homicidio involuntario en lugar de asesinato. La familia de la víctima dijo estar desanimada por la decisión del juez de no darle ninguna pena de prisión a la acusada.

"Acaban de darle a todos en el condado una licencia para matar a personas después de fumar marihuana", dijo Sean O'Melia, el padre de la víctima.

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